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Solar Fotovoltaica, la energía inagotable.

El sol… fuente “inagotable” de producción energética. (del latín sol, solis, ‘dios Sol invictus’ o ‘sol’, a su vez de la raíz protoindoeuropea sauel-, ‘brillar’)​ es una estrella de tipo-G de la secuencia principal y clase de luminosidad V que se encuentra en el centro del sistema solar y constituye la mayor fuente de radiación electromagnética de este sistema planetario…

Pero no vamos a hablar del sol, si no de lo que este nos proporciona para producir energía a través de placas fotovoltaicas.

La energía solar fotovoltaica es actualmente la forma más eficiente de producir electricidad, puesto que se genera y se consume en el mismo lugar a partir de una fuente limpia, renovable e inagotable, y que ya sabemos cuál es… el sol. Es, sin lugar a duda, la energía renovable más importante de la que disponemos.

Y…

¿Cómo funciona un sistema solar fotovoltaico? Los elementos fundamentales de un sistema fotovoltaico son los paneles solares, formados por módulos y estos a su vez, por células fotovoltaicas. Estas células están fabricadas con silicio cristalino, capaz de generar corriente continua cuando recibe la luz solar. Esto se consigue gracias al efecto fotovoltaico.

¿Por qué se produce este efecto? Cuando las células fotovoltaicas captan los fotones, liberan electrones, los cuales circulan de forma permanente por el material, debido a la presencia de un campo eléctrico. El flujo de electrones es el que permite producir corriente eléctrica que se entiende como electricidad.

Además de los paneles solares, elemento principal de un sistema fotovoltaico, el resto de los componentes, como son el inversor, el medidor de energía y opcionalmente las baterías, serán los encargados de proporcionarnos la energía necesaria para cubrir la demanda eléctrica de nuestra vivienda o negocio.

Dependiendo de la cantidad de luz solar captada por los paneles solares, se producirá más o menos energía. Si se produce más energía de la requerida, ésta se puede verter a la red eléctrica. En el caso de que fuera menor, porque el sistema fotovoltaico no nos suministra la energía demandada, siempre podremos abastecernos de la energía de la red eléctrica.

De esta forma tan sencilla, y aprovechando la luz del sol, podemos producir energía limpia, lo que nos permite reducir la demanda de electricidad de la red y ahorrar considerablemente en la factura de la luz, la cual cada vez es más elevada.

Energía fotovoltaica vs energía eléctrica tradicional. El abaratamiento en el coste de instalaciones fotovoltaicas, los avances tecnológicos en este campo y una normativa favorable están desbancando a otras fuentes como el petróleo o el carbón.

Producir energía a través de una fuente gratuita e inagotable reduce significativamente la factura eléctrica mensual y la dependencia de la red eléctrica pública. Esta independencia energética nos protege contra el aumento del coste de la electricidad y contra la volatilidad en el precio de los combustibles.

Todos sabemos, y lo estamos viendo, el aumento progresivo en el consumo y en el precio de la electricidad, por lo que la energía solar fotovoltaica se ha convertido en una solución rentable y una inversión segura.

¿Dónde está una posible solución a este problema? La respuesta está en el AUTOCONSUMO FOTOVOLTAICO, la forma individual o colectiva de producir energía para el propio consumo, es decir, podemos cubrir las necesidades eléctricas de una vivienda o negocio. La instalación de placas solares ofrece numerosos beneficios tanto económicos como medioambientales, de ahí que su auge sea imparable.

¿Beneficios de la energía solar? La energía solar tiene 2 beneficios importantes:

  • Beneficios medioambientales:
    • Se trata de una energía verde que no produce emisiones de efecto invernadero.
    • Considerada como una de las energías más seguras.
    • Es totalmente silenciosa.
  • Beneficios económicos:
    • Importante ahorro en la factura de la luz desde el primer día de su puesta en marcha.
    • Revalorización de los inmuebles que disponen de una instalación fotovoltaica.
    • Bonificaciones, con reducción, dependiendo de cada Ayuntamiento, de hasta un 50% en el pago del IBI.
    • Rápida amortización de la instalación, estimada en un plazo medio de 6 años.
    • Alta rentabilidad, cercana al 16% y sin riesgo.
    • Tendencia a la baja en el coste de las instalaciones fotovoltaicas, hasta un 80% en los últimos años.
    • Importantes subvenciones, de hasta el 80% de la inversión, en el precio total de la instalación

Pues aquí tienes un poco mas de información sobre la energía solar, que esperamos te haya servido de ayuda.

En nuestro próximo post, hablaremos de que es un panel solar, como funciona, como se instala, distintos tipos de paneles y el resto de componentes que lleva o puede llevar una instalación

 

Fuentes de información:

Aerotermia. ¿Qué es? Funcionamiento.

La aerotermia es un sistema de climatización que permite, mediante el intercambio de calor, obtener energía del aire para convertirla en calefacción, refrigeración o agua caliente mediante un solo equipo.

Es la tecnología limpia más eficiente, al ser capaz de extraer hasta un 75% de la energía ambiental del aire para su funcionamiento y al mismo tiempo, la que mayor rendimiento ofrece, al aportar más energía que la que consume reduciendo emisiones y ahorrando en nuestra factura energética.

¿Cómo funciona una aerotermia? De forma entendible, podemos decir que aprovecha energía ambiental contenida en la temperatura del aire y convertirla en calefacción, refrigeración o agua caliente (ACS) mediante un solo equipo.

Estos equipos de climatización se basan en un ciclo de refrigeración reversible que utilizan como base la energía del aire para climatizar los diferentes espacios, por tanto, podemos considerar que es una fuente de energía altamente eficiente y totalmente limpia.

Pasos del funcionamiento de una aerotermia.

  • Extracción de la energía del aire. La bomba de calor dispone de una unidad ubicada en el exterior de la vivienda para recoger el aire que se transfiere al interior de la bomba.
  • Evaporador. En el interior de la bomba de calor hay un circuito por el que fluye el refrigerante a muy baja temperatura. En la primera parte del circuito se encuentra el evaporador, lugar donde el refrigerante absorbe el calor del aire en un intercambio de calor y se produce la evaporación.
  • Compresor. El refrigerante en estado gaseoso llega a un compresor que aumenta su presión y por consiguiente la temperatura. Este es debido a que cuando aumenta la presión de un gas, sus partículas se desplazan más rápido y colisionan más veces originando un incremento de temperatura.
  • Condensador. Este elemento actúa como un intercambiador de calor. El refrigerante entra a alta temperatura y cede el calor al agua que va a ser usado para la calefacción y ACS a través del suelo radiante, radiadores de baja temperatura, aire acondicionado Split o fan-coils.
  • Válvula de expansión. Tras ceder el calor al agua, el refrigerante aún se mantiene a una temperatura muy alta para volver al evaporador y captar el calor del aire exterior. Por esta razón ha de pasar por la válvula de expansión, la cual disminuye su presión de forma drástica y con ello, su temperatura, volviendo a estado líquido listo para reinicia el proceso.

Con todo esto, para obtener calefacción en invierno, aire acondicionado en verano y agua corriente sanitaria en nuestra vivienda a través de la aerotermia, el sistema nuestro sistema debe contener una bomba de calor aire-agua, un depósito de inercia y un depósito de ACS.

Bomba de calor. Es el componente principal de la instalación. Hay 2 tipos de bombas de calor:

  • Bombas de calor aire-aire: permiten extraer energía del aire para calentar o enfriar la estancia pero no funcionan para ACS, disminuyendo la rentabilidad del sistema. Esta bomba de calor es la más habitual en el mercado, como el aire acondicionado.
  • Bombas de calor aire-agua: La bomba de calor aire agua o aerotermia es el sistema de climatización que se está imponiendo en el mercado en los últimos años, posicionándose como la climatización ecológica más eficiente.

La eficiencia de una bomba de calor se mide mediante el coeficiente de operación (COP). ¿Qué nos indica este coeficiente? Básicamente el rendimiento, es decir, la cantidad de kWk que es capaz de producir por cada kWh que consume. El COP oscila entre 2 y 6 en función de la temperatura exterior e interior y la calidad de la propia bomba de calor.

Depósito de inercia. Los diferentes modelos de aerotermia llevan un depósito de inercia donde almacenar el agua caliente generada para su uso posterior. Este depósito puede estar integrado en la bomba de calor o separado y recibe el agua caliente de la bomba a unos 45º C, este la mantiene a dicha temperatura hasta que se produce una demanda de calefacción. Es entonces cuando la bomba hace llegar el agua al suelo radiante o a los radiadores de baja temperatura y así calentar la vivienda.

Depósito de ACS. El agua caliente sale de la bomba de calor y va al depósito de inercia de calefacción. En ese trayecto hay una válvula de 3 vías que, cuando se produce una demanda de agua caliente, se acciona cortando el paso hacia el depósito de inercia y desviándolo hacia el depósito de agua caliente sanitaria (ACS). Este depósito de ACS dispone de un serpentín en su interior para mantener el agua caliente y poder ser usada según nuestras necesidades en la vivienda.

Tipos de aerotermia. Un sistema de aerotermia puede estar formado por una bomba de calor monobloc o una bomba de calor bibloc, lo que especifica si el sistema está compuesto por uno o dos equipos.

  • Bomba de calor monobloc: Se trata de una sola unidad exterior dónde se integra la bomba de calor y el módulo hidráulico (hidrokit). Es un sistema mucho más compacto ya que prescinde de la unidad interior y de instalación frigorífica con una instalación sencilla al no requerir instalación frigorífica, menor costo económico al sólo necesitar de su conexión al circuito de calefacción para comenzar a funcionar.
  • Bomba de calor bibloc: Se compone de dos unidades, una bomba de calor o unidad exterior y el módulo hidráulico (hidrokit) o unidad interior. Ambos, permanecen conectados a través de las conexiones de refrigerante y agua adecuadas, siendo el hidrokit el que distribuye la energía calorífica. Este sistema requiere más espacio dentro del domicilio y para su instalación será necesaria una conexión frigorífica integrada en la casa.

Con toda esta información técnica, la pregunta seguirá en el aire y cualquier persona interesada, preguntara…

¿Qué beneficios tiene la aerotermia con respecto a los sistemas actuales para refrigerar, climatizar y obtener agua caliente sanitaria? Uno de los principales beneficios de la aerotermia es el ahorro energético que aporta si lo comparamos con otros sistemas de calefacción más tradicionales.

El primer punto importante es que la aerotermia, al utilizar como fuente de energía la temperatura del aire para la producción de agua caliente sanitaria y climatización (tanto calefacción como aire acondicionado) es considerada una fuente de energía renovable y sostenible.

El segundo punto a tener en cuenta es que es un sistema de eficiencia elevada, esto quiere decir que, la relación entre la potencia calorífica requerida y el consumo eléctrico de la máquina para satisfacer la demanda de calor, proviene del aire exterior, por este motivo su rendimiento es muy superior a los sistemas tradicionales.

El tercer punto, y que en los tiempos actuales más nos preocupa es el ahorro energético. Gracias a que obtiene hasta el 75% de la energía del aire y, por tanto, requiere menos energía eléctrica para su funcionamiento, solo un 25%, el coste de la factura energética se reduce notablemente, llegando a alcanzar un ahorro de hasta el 70% en temporada de calefacción (calculándolo en base a comparativa de consumos reales).

El cuarto punto y no menos importante, ya que es el que sentimos cuando estamos en nuestra casa, es el confort. Al contrario de los sistemas de calefacción mediante combustión, los sistemas de aerotermia ofrecen mejor rendimiento con una temperatura estable a lo largo de todo el día. Además, la aerotermia funciona a bajas temperaturas, con lo que no se producen grandes variaciones de temperatura en los diferentes espacios de la vivienda y la distribución de calor es uniforme.

El quinto punto, y muy importante a lo largo de la vida de los equipos, es su mantenimiento y seguridad. Los equipos con bombas de calor aire-agua carecen de quemador y de cámara de combustión, por lo que no se produce ningún tipo de residuo durante su funcionamiento, esto significa que la instalación necesita poco mantenimiento, pero, si es necesario que la empresa instaladora revise periódicamente el sistema para garantizar la plena eficiencia del mismo.

Estos equipos, al no disponer de un depósito de almacenamiento de combustible como gas, gasóleo o biomasa, el riesgo de sufrir algún tipo de accidente doméstico relacionado es nulo. Es un sistema estanco, lo que significa que en todo momento, el fluido refrigerante se mantiene dentro del circuito sin producir ningún tipo de escape. No produce gases contaminantes convirtiéndose en un sistema de climatización beneficioso para la salud y respetuoso con el medio ambiente.

El sexto punto, muy relevante, el aspecto económico. Una aerotermia, no es una instalación barata de acometer, pero sí que es cierto, que su amortización a medio plazo, teniendo en cuenta los beneficios que se obtienen en la reducción de impuestos y subvenciones para su instalación es una opción muy interesante para cualquier vivienda. El periodo de amortización de la instalación de aerotermia suele situarse entre 5 a 10 años o incluso inferior si combinamos la aerotermia con paneles solares, un complemento de ahorro energético cada vez más usado. Las viviendas con instalaciones de aerotermia consiguen una mejora de la calificación energética. En algunos municipios de España, esta mejora sirve para obtener una reducción en el impuesto de bienes inmuebles (IBI), además de revalorizar el inmueble.

Y por último, tenemos que tener en cuanto que su instalación es sencilla, no requiere de permisos ni trámites administrativos, debido a que las operaciones de montaje no conllevan ningún tipo de obra. Solo es necesario contar con el espacio adecuado para ubicar el sistema y que un técnico cualificado haga la instalación (2-3 días).

No requiere chimenea ni precisa de ningún conducto de evacuación de gases de combustión. No hay dependencia de combustibles fósiles, al usar el aire como principal recurso, la aerotermia requiere únicamente de electricidad para su funcionamiento.

Trabaja a baja temperatura, que es la clave de su eficiencia, Su temperatura de impulsión, o lo que es lo mismo, la temperatura a la que circula el agua por sus emisores es mucho menor que en los sistemas tradicionales.

Esperamos que ahora, tengas un poco mas claro que es una aerotermia y valores si es lo que necesitas para tu vivienda.

Fuentes e imagenes: https://www.activaenergiasrenovables.com/

Consejos para ahorrar energía

Todos hemos oído hablar de como ahorrar energía en casa con nuestros sistemas de calefacción; pero ¿de verdad se pueden conseguir ahorros, sobre todo durante el invierno, cuando la necesidad de encender la calefacción es un hecho?

Partamos de los siguientes datos relevantes:

El calor en la vivienda fluye desde las habitaciones calientes hacia las más frías, y desde abajo hacia arriba. En promedio, el calor de la casa se pierde por las siguientes vías: piso (15%); paredes (35%); ventanas (10%); techo (25%); rendijas normales (15%). Una rendija anormalmente grande puede aumentar enormemente la proporción de calor perdido de nuestra vivienda.

Una gran cantidad de la energía que se consume en una vivienda a lo largo del año se destina a 2 objetivos: la calefacción y el agua caliente sanitaria.

Sin ser un especialista y solo prestando un poco a las condiciones de nuestra vivienda, sabemos cuáles pueden ser las causas y como podemos ahorrar en calefacción y poder conseguir un ahorro considerable en la factura energética. Es simple, una vivienda mal aislada necesita más energía para mantener su confort.

Lo primero es comprobar los aislamientos de ventanas y persianas. Una medida muy eficiente es instalar sistemas de doble ventana (o, al menos, el doble acristalamiento), ya que conseguiremos reducir prácticamente a la mitad la pérdida de calor con respecto al cristal sencillo. También es importante que los cajetines de las persianas no tengan rendijas y estén convenientemente aislados.

La segunda parte, que necesita algo más de inversión, afecta al aislamiento entre muros, que pueden conllevar ahorros energéticos y económicos de más de un 20% en calefacción.

Las temperaturas recomendadas en invierno, dentro de las viviendas, están comprendidas entre 19ºC y 21ºC por el día y 15ºC a 17ºC por la noche (hora de dormir) para sentirnos bien y tener un consumo energético moderado. Es muy importante entender que por cada grado que aumentemos la temperatura, se incrementa el consumo de energía aproximadamente en un 7%.

Para los radiadores y conseguir mantener una buena temperatura en las habitaciones, un procedimiento sencillo y asequible (económicamente hablando), consiste en la instalación de válvulas termostáticas en los propios radiadores. Esto nos va a hacer ahorrar mucha energía al mantener constante la temperatura.

Es muy importante, no tapar ni obstruir los radiadores para aprovechar al máximo el calor que emiten. En el caso de que estén situados en huecos, es recomendable, colocar elementos reflectantes detrás de los mismos. También es fundamental el purgado (extraer el aire) de forma periódica (al principio de cada campaña de invierno) o cuando pongamos la calefacción en marcha.

La instalación de termostatos inteligentes puede conseguir una buena optimización de la gestión y control de nuestra calefacción. Si a esto le sumamos, sistemas de control y regulación centralizados (domótica), que permiten diferenciar distintas zonas, registrar y dar la señal de aviso en caso de averías, integrar funciones de seguridad y poder manejar los equipos instalados y conectados a nuestra red a distancia a través de nuestro teléfono móvil, esto, también permite ahorrar en la factura.

Es conveniente apagar la calefacción durante la noche (salvo en zonas muy frías), y en aquellas habitaciones que sean menos utilizadas, poniendo la posición del termostato en el modo de economía (15ºC), que es la misma recomendable si no vamos a estar en la vivienda en ausencias, más o menos prolongadas, incluso llegando a apagarla en ausencias de más de 15 días.

Otro factor importante que afecta a la temperatura de nuestras viviendas y que es un mal bastante generalizado, que nos hace malgastar energía, es la ventilación. Para ventilar completamente una habitación es suficiente con mantener abiertas las ventanas alrededor de 10 minutos (máximo 15) para renovar el aire.

Otra forma de conseguir una optimización en el consumo es conseguir un buen funcionamiento de nuestra caldera (cualquier tipo), esta, debe someterse a revisiones periódicas. Es aconsejable una revisión anual al inicio de la temporada de calefacción. Una caldera sucia tiene dificultades para la combustión y, por tanto, consume más. Un mantenimiento adecuado del sistema de calefacción (caldera y radiadores) nos ahorrará hasta un 15% de la energía.

Y, para terminar, algo que sabemos que es complicado, es entender si tenemos la tarifa energética adecuada para nuestro consumo y si podemos mejorarla.